Blogia
MADERA DE NÁUFRAGO. Blog de Luis Vea.

ACUERDO DRACONIANO

ACUERDO DRACONIANO

Resulta que uno no puede vender los libros que la editorial pone a su disposición. Con la excusa de promocionar a los autores locales una biblioteca ha comprado un par de ejemplares de mis libros pero como el autor no puede hacer factura de iva he tenido que pasar por el intermediario. Y así, sin comerlo ni beberlo, se ha llevado un treinta por ciento de la ganancia, simplemente por hacer la factura. Y a uno se le ha quedado la cara de tonto(el autor sólo recibe el diez por ciento). Claro que lo mejor de todo ha sido cuando la librera de turno me ha espetado: Si quieres puedes regalarlo a la biblioteca. Sí, señora, sí. Con eso pasaremos de ser tonto a ser gilipollas. Y encima pretendía perdonarme la vida.

5 comentarios

Apostillas literarias -

Igual es aquí en México, un horror. Algo se debería de hacer, esto no puede continuar de esta forma. Y lo peor, en ocasiones ni tan siquiera distribuyen los libros.

Inma Arrabal -

Querido Luis, ya estás en un grupo de muchos...
Aprovecho desde aquí, para saludar a Alena: Un abrazo, guapa. Te leo siempre que puedo.

Alenarte Revista -

Conozco el tema, para mi desgracia.
Un placer leerte, me alegra conocer tu blog.
Alena. Collar.

Jarto -

Veo que el mundo literario también tiene su lado oscuro. Ánimo y suerte.

Francisco Mesa -

¿Sólo el 30%? Cómo se nota que favorecen la cultura local... ;-)